SOY EDUCADORA SOCIAL

Hace justo cinco años, pensé que sería interesante volver a la Universidad. Empecé a pensar en estudios que verdaderamente me llenaran ya que hacía  muchos años había estudiado Ingeniería Técnica Industrial Electrónica y no había resultado ser lo que yo esperaba; que tuvieran que ver con la educación por mi vocación de profesora. Acababa de realizar el Diploma de Intervención Social de Cáritas y había aprendido mucho acerca de la realidad social que estábamos viviendo, así que pensé que tenía que ser algún estudio relacionado con el área social. Tampoco quería dejar de lado mi trabajo con los adultos en formación continua, puesto que ha sido una de las actividades más gratificantes que he realizado; impartí un curso de Monitor de Tiempo Libre del que salió un grupo con el que creamos la Asociación cultural de tiempo libre Luna Lunae. Por demanda de Mercedes, la madre de uno de mis alumnos de matemáticas que era la presidenta de una Asociación de Mujeres, comencé a organizar actividades socioculturales.  Había preparado varias personas adultas para las pruebas de Acceso a Grado Superior e incluso una a Bachillerato y me di cuenta de lo rápido que pasa el tiempo y como iban alcanzando sus metas profesionales, la mayoría de ellas estudiando a distancia.  Tenía  un problema añadido, no podía dejar mi trabajo para asistir a las clases en la Universidad de Zaragoza, así que empecé a indagar en la oferta formativa de la UNED (Universidad Nacional de Educación a Distancia).Y apareció la carrera de mis sueños, que además comenzaba a ser Grado tras la adaptación al Plan Bolonia, EDUCACIÓN SOCIAL, con una duración de cuatro años. 

Después de cinco años duros en los que he tenido que compaginar el trabajo,  los estudios  y el cuidado de mi hija que nació hace casi tres años, puedo decir que SOY EDUCADORA SOCIAL. 

Y no quiero ponerme como ejemplo de nada, porque en el camino he conocido  gente muy luchadora, con condiciones muy adversas, que se han sacrificado y también lo han conseguido.  Sólo quiero que lo veáis como un "Si quiero, puedo", independientemente de la edad.

He de decir que es emocionalmente más fácil estudiar en edad adulta que en la adolescencia. Me explico: los jóvenes tienen que memorizar, pero los adultos utilizamos la lógica. Me he visto en muchas recuperaciones de septiembre en las asignaturas más teóricas y sin embargo he obtenido muy buenas notas en las asignaturas prácticas. Voy a comenzar un Máster, ¡ya os contaré si me va igual de bien!.

Hoy, día 2 de Octubre, se celebra el DÍA MUNDIAL DE LA EDUCACIÓN SOCIAL. Y me gustaría acercaros un poquito más a esta desconocida profesión detallando los ámbitos en los que ejerce su actuación profesional un Educador Social:

- Desarrollo comunitario y generación de redes sociales

- Animación sociocultural y gestión cultural

- Intervención socioeducativa en los ámbitos familiar, escolar y laboral

- Educación para el ocio y tiempo libre

- Intervención socioeducativa en educación ciudadana (educación ambiental, salud, género, vial, intercultural, cooperación internacional, etc.)

- Educación de adultos y personas mayores

- Acción socioeducativa con minorías y grupos sociales desfavorecidos.

Ámbitos en los que, como educadores y educadoras sociales, desempeñamos tareas de diagnóstico y prevención, diseño, planificación e intervención, coordinación, gestión y evaluación, desarrollo, mediación, orientación y formación.

Quiero aprovechar esta magnífica plataforma que nos brindan las herramientas de la sociedad del conocimiento para agradecer a todos mis alumnos y personas con las que he trabajado en las diferentes actividades realizadas en estos años la confianza que han depositado en mí y la importancia que todos han tenido en mi desarrollo personal. Y por supuesto a mi familia, ¡mi mayor tesoro!. 

Rocío Gregorio